Política
Tensión en Alepo, Siria: Fuerzas rebeldes toman el control de la mayoría de la ciudad en la mayor ofensiva contra el gobierno de Bashar al Assad en años
Alepo, la segunda ciudad más grande de Siria, se encuentra en el centro de una intensa batalla entre las fuerzas rebeldes y el gobierno de Bashar al Assad.
Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (SOHR), las fuerzas opositoras, lideradas principalmente por Hayat Tahrir al Sham (HTS) y otros grupos aliados, han logrado tomar el control de la “mayoría” de la ciudad tras una ofensiva de gran escala, la más grande contra el gobierno en años. Este es el primer avance significativo de los rebeldes en Alepo desde que fueron expulsados por el ejército sirio en 2016.
Desde el inicio de la ofensiva el miércoles, más de 300 personas han perdido la vida, incluidos más de 20 civiles, mientras que los combates continúan en diferentes partes de la ciudad.
El SOHR ha informado que la ofensiva rebelde avanzó rápidamente en Alepo, con los militares sirios retirándose en varias áreas sin ofrecer una resistencia significativa. Entre los edificios vacíos dejados por las fuerzas leales al régimen se encuentran el ayuntamiento, comisarías de policía y oficinas de inteligencia.
La situación en la ciudad es caótica, con miles de civiles atrapados entre los combates y una creciente inseguridad. Según informes, Rusia, aliado clave del régimen sirio, ha llevado a cabo ataques aéreos sobre Alepo, dejando muertos y heridos en diversas zonas.
La ONU ha expresado su alarma por los impactos humanitarios de los enfrentamientos, con al menos 27 civiles muertos en los últimos días, incluidos niños.
La ofensiva ha provocado también una gran movilización de refugiados dentro de la ciudad, generando alta congestión en las salidas. Testimonios de residentes describen una atmósfera de miedo e incertidumbre, sin saber qué depara el futuro inmediato.
HTS, el grupo armado islamista que lidera la ofensiva, controla gran parte de la provincia de Idlib, vecina de Alepo, y se considera una de las principales facciones opositoras al régimen.
Aunque el grupo asegura no estar vinculado a organizaciones terroristas, tanto Estados Unidos como la ONU lo consideran parte de Al Qaeda.
El gobierno sirio, apoyado por Rusia e Irán, ha respondido con una serie de bombardeos aéreos, mientras que las fuerzas rebeldes siguen avanzando en la ciudad.
Mientras tanto, en la región, otros conflictos, como la creciente campaña militar israelí en Líbano contra Hezbolá y los ataques aéreos israelíes en Siria, han intensificado la inestabilidad en la zona.
A medida que las facciones internacionales y locales se alinean para sus respectivos intereses, la población civil sigue siendo la más afectada por la violencia y los desplazamientos masivos.