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Meloni defendió a los agricultores europeos, anunció paquete de medidas en su favor

«La sostenibilidad económica y social no puede ser reemplazada por la sostenibilidad ambiental«, aseguró la premier italiana Georgia Meloni en una conferencia de prensa esta semana que se viralizó en redes por su contundencia, al asegurar que «Europa ha tenido un abordaje ideológico incorrecto«.
En Italia, el gobierno se encuentra trabajando en proyectos que liberen y promuevan el sector agrícola, algo que se diferencia de países como Francia y Alemania, que ceden ante la presión de la agenda globalista medioambiental y están destruyendo a sus sectores rurales.
Con el nombre Made in Italy, Meloni impulsa desde los inicios de su gestión una medida que busca promover los productos del sector primario y de la gastronomía italiana. El campo, en este sentido, es entendido como el garante de una alimentación sana y saludable, como un eslabón clave de la cadena alimentaria europea.
En este sentido, el gobierno de Meloni apuesta por proveer al sector de incentivos y desregulaciones, en contra de la moda en sus pares europeos, que están imponiendo altísimos aranceles junto con impuestos destructivos al sector rural.
Italia ya avanzó en algunas cuestiones claves: se aumentaron los recursos para el fondo agrícola de 5 a 8 mil millones de euros, además de duplicar los fondos para tecnología agrosolar y los contratos de la cadena de suministro.
Asimismo, Meloni confirmó la entrega de subvenciones al diésel, el principal combustible que usan los tractores, para evitar que el contexto de crisis esto impacte en el sector. En medio de malas cosechas por la sequía y la guerra en Ucrania, Italia ha decidido adoptar una política diametralmente opuesta a la de los demás gobiernos europeos, que han decidido quitar subsidios y subir impuestos.
Esta semana, los agricultores se agruparon frente al Parlamento Europeo en Bruselas continuando con una ola de protestas por esta política a destiempo. Nicola Procaccini, parlamentario de Fratelli miembro del bloque derechista Conservadores y Reformistas Europeos (ECR), aseguró que «el ambientalismo no va a destruir la pasión y el trabajo de generaciones de italianos y europeos que viven y trabajan en la naturaleza«.
La semana anterior, Meloni celebró en Roma la cumbre Italia-África donde anunció el «Plan Mattei«. Este ambicioso programa busca resolver el grave problema de los migrantes europeos de una forma ordenada y con propuestas productivas.
La agricultura también es un capítulo que abarca este proyecto, ya que la primera ministra buscará fomentar el desarrollo de las cadenas agroalimentarias y se apoyará en el desarrollo de biocombustibles para reducir la malnutrición en el continente africano. Esto dará nuevas perspectivas de crecimiento al sector, con exportaciones preferenciales a los países que forman parte del pacto.
Mientras Italia avanza con pasos seguros hacia el cumplimiento de una agenda productiva, sin déficit, y de desarrollo para sus sectores productivos, Europa se debate entre gobiernos con adherencias socialista. En Francia, Macron llamó a una reforma agraria que «cambie profundamente las reglas» luego de participar del encuentro de líderes europeos en Bruselas.
Si bien la cumbre del Parlamento Europeo no tenía como objetivo debatir las políticas agrícolas europeas, ninguno pudo hacer caso omiso de lo que ocurría puertas afuera, donde los productores comenzaron a arrojar huevos contra el edificio.
«Los vemos y los oimos» expresó Roberta Metsola, la maltesa quien oficia de Presidente del Parlamento Europeo, ante los agricultores reunidos. Sin embargo, los bloques centristas han estado boicoteando junto a la izquierda el desarrollo de propuestas concretas que solucionen los problemas del sector, como por ejemplo la caída en el consumo, la altísima carga impositiva que enfrentan, el ahogo en regulaciones medioambientales y los aranceles en los mercados internacionales.
Via: derecha diario